Las aves psitaciformes, también conocidas como loros o guacamayos, son un grupo maravilloso de aves que han capturado la atención y el interés de las personas desde hace siglos. Estas aves, conocidas por su inteligencia, belleza y capacidad para imitar el habla humana, han sido objeto de estudio y admiración en todo el entorno. Sin embargo, ¿sabías que las aves psitaciformes tenían un nombre diferente en el pasado?
¿Qué aves son Psitaciformes?
Las aves psitaciformes son un orden de aves que incluye loros, guacamayos, pericos y cacatúas. Estas aves se caracterizan por tener un pico fuerte y curvado, patas fuertes con garras afiladas y una capacidad única para imitar sonidos y palabras humanas. Son conocidas por su colorido plumaje y su capacidad para vivir en diferentes hábitats, desde selvas tropicales hasta zonas desérticas.
Cuántas especies de psitácidos hay
Existen más de 400 especies de aves psitaciformes en todo el entorno, distribuidas en diferentes regiones y ecosistemas. Estas especies varían en tamaño, color y comportamiento, pero comparten características comunes que las hacen reconocibles como miembros de la familia de los psitácidos.
En México, por ejemplo, se encuentran 22 especies de loros, todas protegidas por las leyes mexicanas debido a la disminución de sus poblaciones en las últimas décadas debido a la captura ilegal y la destrucción de sus hábitats naturales.
Tráfico ilegal de loros en México
El tráfico ilegal de loros es una de las principales amenazas para estas aves en México y en todo el entorno. Más de 150 especies de loros se encuentran amenazadas o en peligro de extinción debido a la captura ilegal y el comercio clandestino. A pesar de los esfuerzos internacionales para combatir este problema, el tráfico de loros sigue siendo un negocio lucrativo que genera cientos de millones de dólares cada año.
En México, la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES) ha jugado un papel importante en la protección de los loros nativos. La mayoría de los países que poseen loros en su territorio han prohibido la importación y exportación de estas aves con fines comerciales. Sin embargo, el tráfico ilegal sigue siendo una preocupación en muchas regiones.
Situación en México
Los loros son una parte fundamental de la biodiversidad de México y su captura ilegal y comercio clandestino representan una amenaza para su supervivencia. La simpatía y belleza de estas aves las han convertido en un objetivo para el tráfico ilegal y la demanda de mascotas exóticas.
En México, los loros se agrupan en cuatro categorías según su tamaño: guacamayas, loros y cotorros, pericos y periquitos. Estas aves son protegidas por las leyes mexicanas, pero su captura ilegal y la destrucción de sus hábitats continúan siendo un problema.
Acciones de la Profepa
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) es la institución encargada de proteger la flora y fauna de México. En su lucha contra el tráfico ilegal de loros y otras especies de psitácidos, la Profepa realiza operativos en lugares de acopio, transporte, distribución y centros de comercio donde se ofertan estas aves.
En los últimos años, la Profepa ha logrado asegurar miles de ejemplares de loros y otras aves psitaciformes. Estos operativos se intensifican durante la temporada de crías, que va de febrero a mayo, cuando hay una mayor demanda de estas aves en el mercado ilegal.
Ejemplares asegurados por especie:
- Perico atolero o Perico frente naranja: 2,012 ejemplares
- Perico pecho sucio: 75 ejemplares
- Loro Nuca Amarilla: 10 ejemplares
- Loro Cachetes amarillos: 182 ejemplares
- Loro Cabeza azul: 36 ejemplares
- Loro cabeza amarilla: 44 ejemplares
- Loro frente blanca: 49 ejemplares
- Loro cabeza de viejo: 9 ejemplares
- Guacamaya verde: 10 ejemplares
Estas acciones son parte de los esfuerzos para proteger la biodiversidad y garantizar la supervivencia de estas aves en México.
Las aves psitaciformes, conocidas como loros o guacamayos, son un grupo maravilloso de aves que enfrentan amenazas como el tráfico ilegal y la destrucción de sus hábitats naturales. En México, se han implementado medidas para proteger a estas aves y combatir el comercio ilegal, pero aún queda mucho por hacer.
Es responsabilidad de todos cuidar y preservar la biodiversidad de nuestro país, y las aves psitaciformes son un claro ejemplo de la importancia de tomar acciones para proteger a estas especies.
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