Existen diversas especies de aves que tienen la capacidad de correr sobre el agua, lo cual es una habilidad impresionante y poco común en el reino animal. Una de las aves más conocidas por esta habilidad es el basilisco, un género de lagartos de la familia Corytophanidae que se encuentra en la selva tropical de América Central y del Sur.
Características del basilisco
Los basiliscos son lagartos similares a las iguanas, pero de aspecto más ágil y esbelto. Se diferencian por tener una o dos crestas, generalmente una sobre la cabeza y otra, de mayor tamaño, sobre el dorso. Estas crestas pueden llegar hasta una cuarta parte de su cola. Su alimentación es más ecléctica, consumiendo gran variedad de alimentos. Son de temperamento nervioso y acelerado.
En promedio, los basiliscos miden entre 70 y 75 cm de longitud total, incluyendo la cola. Su crecimiento es perpetuo, siendo más rápido cuando son jóvenes y no lineal para los basiliscos maduros. Su piel se desprende en pedazos.
Movilidad sobre el agua
La habilidad más impresionante de los basiliscos es su capacidad para correr sobre la superficie del agua. Sus patas posteriores están provistas de lóbulos dérmicos que funcionan como aletas, aumentando así la superficie de apoyo sobre el agua. Estos lóbulos se enrollan cuando el animal camina por tierra, pero se abren cuando el basilisco necesita correr sobre el agua.
Esta habilidad les permite escapar rápidamente de sus depredadores, ya que pueden correr a una velocidad extraordinaria sobre la superficie de ríos y lagos. Sin embargo, esta capacidad tiene un límite y, después de unos minutos, el basilisco se hunde y debe nadar como cualquier otro lagarto.
Otros mecanismos de defensa
Además de su habilidad para correr sobre el agua, los basiliscos tienen otros mecanismos de defensa. Por ejemplo, pueden excavar en la arena para esconderse de sus depredadores. Para evitar que la arena invada sus fosas nasales, poseen un anillo de músculos alrededor de ambas fosas nasales.
Especie invasora
Una especie de basilisco llamada Basiliscus vittatus, también conocido como basilisco marrón, se ha introducido en Florida. Esta especie ha logrado adaptarse a los inviernos más fríos enterrándose en la hojarasca para obtener calor. Se ha avistado en lugares como Boca Ratón y otras ciudades del condado de Palm Beach.
El basilisco es un lagarto maravilloso que posee la habilidad de correr sobre el agua, una capacidad que lo hace único en el reino animal. Su agilidad y velocidad le permiten escapar de sus depredadores y sobrevivir en su hábitat natural. Sin duda, el basilisco es una de las aves más impresionantes y admirables de la naturaleza.
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