La llegada de un loro a nuestro hogar es un momento emocionante y esperado por todos. Sin embargo, es importante recordar que este cambio puede resultar estresante para el ave, ya que implica un nuevo entorno, nuevas personas, una nueva jaula y una nueva dieta. Por lo tanto, es fundamental que tomemos ciertas precauciones para asegurarnos de que nuestro loro se adapte de manera adecuada y se sienta seguro y confiado en su nuevo hogar.
Preparativos antes de la llegada
Antes de traer a nuestro loro a casa, debemos asegurarnos de tener todo listo para su llegada. Esto incluye tener una jaula adecuada, limpia y desinfectada, con todos los accesorios y juguetes necesarios. Es importante evitar jaulas pequeñas, rotas o redondas, ya que nuestro loro necesitará espacio suficiente para moverse cómodamente. Una vez que la jaula esté lista, debemos asegurarnos de proporcionarle agua y comida, aunque es posible que el ave no coma mucho durante los primeros días debido al estrés del cambio.
Permitir que el loro se adapte a su nueva jaula
Después de alojar al loro en su nueva jaula, es importante permitirle que se acostumbre a su nuevo entorno de forma tranquila. Dejemos que explore la jaula, descubra sus juguetes, encuentre el alimento y el agua. Debemos asegurarnos de que el sistema de agua sea fácil de entender para el ave, especialmente si no está acostumbrada a él. La jaula debe ubicarse en un lugar seguro, como contra una pared o en una esquina de la habitación, para que el loro se sienta protegido. Evitemos ubicarla en pasillos, habitaciones vacías o la cocina, ya que estos lugares pueden resultar estresantes para el ave.
Crear un ambiente adecuado
La habitación en la que alojaremos al loro debe ser soleada y preferiblemente con acceso a luz natural a través de una ventana. Esto permitirá que el ave sintetice vitamina D3 de manera adecuada. Si la habitación no tiene ventanas, podemos colocar una lámpara especial para evitar que el loro sufra deficiencia de esta vitamina. Además, es importante evitar manipular al loro con las manos durante los primeros días para evitar estresar al ave y evitar que desarrolle miedo o fobia hacia las manos. Esto es especialmente importante en aves que no están socializadas y no están acostumbradas a la manipulación.
Es recomendable mantener al loro en cuarentena durante los primeros días, especialmente si ya tenemos otras aves en casa. Después de este período, podemos comenzar a interactuar con el ave y permitirle explorar la casa. Es importante recordar que cada loro tiene su propio ritmo de adaptación, por lo que debemos respetar sus tiempos y no forzar la interacción si el ave no se siente lista. La atención que le brindemos al loro debe ser equilibrada, evitando la dependencia excesiva que puede llevar a problemas de conducta. Si el loro ha sido criado a mano, tener cuidado con la cantidad de atención que le brindamos desde el principio.
Otros aspectos importantes
Además de los cuidados básicos, tener a mano el número de teléfono de un veterinario especializado en aves exóticas, tanto para consultas regulares como para emergencias. Nunca sabemos cuándo podemos necesitar ayuda profesional, y en esos casos, cada minuto cuenta.
La llegada de un loro a nuestro hogar requiere organización, paciencia y cuidados adecuados. Siguiendo estos consejos, podremos ganarnos la confianza de nuestro loro y establecer una relación sólida y armoniosa con nuestra mascota.
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